5.5.10

Japa Mantra


La práctica de los mantras se llama Japa Mantra, se utiliza para un collar de meditación de 108 cuentas hechas de Sándalo, Tulsi o semillas de Rudraksha, una semilla sagrada originaria del Tibet, Nepal e India, la cual tiene propiedades curativas y relajantes. Japa quiere decir repetición, y Mala quiere decir “collar”. Japamala significa collar de repetición y tiene una antigüedad de 6.000 años. El Om solo debe usarse para empezar o terminar la meditación, pronunciándolo tres veces.
La práctica de Japa mantra debe hacerse -en lo posible- con una frecuencia diaria: en la mañana temprano al levantarse y en la noche antes de dormir: sentarse en una posición con las piernas cruzadas y la espalda derecha.
Si duelen las piernas pueden arrodillarse y sentarse sobre los pies. El collar de meditación se toma con la mano derecha y se sostiene con la mano izquierda a la altura del tercer chakra. Los ojos cerrados y la respiración serena.
Cada una de las 108 cuentas del collar se van pasando hacia delante con los dedos: pulgar, mayor y anular de la mano derecha. Nunca se deben usar los dedos índice ni meñique ya que estos están conectados con las energías del ego y la inercia. El collar de 108 cuentas tiene un "Penacho" que representa "la cabeza", llamado Meru o montaña de los dioses, por lo tanto, al llegar con los dedos a ese punto, no se debe atravesar ni pasar por encima, sino que, hay que volver hacia atrás, en el caso de que se quiera, dar más de una vuelta. La vuelta completa finaliza ahí.
Sobre la semilla:  Los védicos dicen que la llegada a nuestra vida de alguna semilla sucede en respuesta al éxito en la trascendencia y expiación de situaciones ya ocurridas en otras vidas, en relación a alguna o algunas deudas kármicas. Es decir: si la rudraksha aparece en tu vida, es que ya has ganado la batalla, una de las múltiples y numerosas que te esperan en el perfeccionamiento del Ser.
Se aconseja llevarla sobre el cuerpo para protección, salud y buena fortuna, o en el bolsillo, y por las noches debajo de la almohada.

Otra forma de recitar los mantras es Ajapa-japa. Consiste en la repetición constante y espontanea, en todo momento y en cualquier lugar. También, en este caso, el mantra ideal es So-Ham.
Cuando no estamos trabajando, estudiando, la mente se queda divagando y pensando en problemas y cosas que nos preocupan y tensionan. En ese momento es, cuando resulta indispensable y útil, practicar con Ajapa-japa y así evitar que la mente divague, creando un estado de concentración. El japa mala de
de semillas de rudraksha es el más tradicional, y está más relacionado con la deidad Shiva. Hay otros de sandalo, piedras y diferentes materiales.